domingo, 4 de noviembre de 2007

cazafantasmas



Irving es mi fantasma domestico, no, no es como los elfos domésticos que cumplen tu caprichos, el hijo de puta de Irving cumple solo sus caprichos es decir hace en teoría lo que se le da la gana

La primera vez que lo vi fue como una película cómica de fantasmas, para variar el no sabe que esta muerto y se pregunta que es lo que hago yo un perfecto extraño en su casa de interés social (la cual salió a la venta cuando el murió, así que en cuanto me vio me dijo en ese dialecto suyo tan refinado

- A la verga morro o te pongo una putiza ese

- Calma mi buen salvaje que yo aquí vivo (le contesté en tono de Cantinflas)

- Ya te dije puto emígrale al nabo

Me ahorraré el resto de la platica y de cómo le explique lo de que es un fantasma, por cierto murió al parecer de un ataque al corazón, algo rápido y fulminante por lo que me cuenta la chismosa vecina de enfrente al parecer el pobre diablo tenia 33 años, era un empleado de gobierno y no se le conocían familiares normales.

Pues bien Irving (que en vida se llamaba Oscar Ernesto Santoyo Román) continúa con su vida normalmente todos los días se levanta maldiciendo a las 7 de la mañana o 7:30 cuando decide

baño y prende el calentador, y enseguida la llave, después se desaparece por horas ya que “esta en la oficina” lo cómodo del asunto es que puedo bajar y encontrar el agua caliente.

Aproximadamente a las 2:30 el pendejo burócrata de Irving regresa de la “oficina”, supongo que trabaja en el archivo muerto jeje (mal chiste), y hace el clásico desmadre de poltergeist en la cocina, vuelan los platos y vasos, y las alacenas quedan abiertas

Mis conocidos piensan que bromeo cuando les digo “veo gente muerta” , inmediatamente se ríen y no me piden mas explicaciones, la semana transcurre sin mayor novedad y todo seria tranquilo si el bastardo de Irving no hubiera sido en vida un pinche naco y asqueroso futbolero, si como lo oyen, compra sus sabritones, su “pecsi” como el dice y se instala en la sala con su playera de la selección a ver los partidos de las televisoras de señal abierta , naquísimo el hijo de perra, lo mas molesto es que al final se la pasa hablándome d estadísticas de futbol.

Por si el ser naco futbolero no fuera bastante, resulta que es de esos que cuentan “yo estuve en las ligas juveniles de tal equipo bla bla bla y me iban a llevar a jugar al Real”, “ja! pendejo seria al re-albañil ”

Irving siempre me platica de una tal María Esther imagino que ha de ser su amor de oficina alguna del departamento de contabilidad o la secretaria o peor aun alguna del departamento de sistemas, no se ni me importa, pero empiezo a sospechar que este pendejo no se murió de un ataque y se suicido metiéndose algo por el desamor de “Mayté” como le llama cariñosamente.

Los sábados en la tarde no estoy en casa así que Irving se pone a ver sus programas corrientes como “bailando por un sueño” o “Sábado Gigante”, todas esas cosas que ven los burócratas corrientes el fin de semana.

He pensado hacer una limpia para mandar a Irving a la chingada, al infierno no se puede porque parece que según me cuentan los entendidos de la materia , esta atrapado aquí hasta que cumpla su misión, espero que su misión no sea acabar con la corrupción o hacer que México gane un mundial porque si es así ya se chingó.

Preguntando un poco sobre el porque de “Irving” como el lo pronuncia, aparte de naco pendejo, Irving me dice que nunca le gusto Damián porque se prestaba para las clásicas bromas de secundaria y ´prepa y no faltaba el listillo que le decía” Damián Santoyo dame e tu santo hoyo” y decidió auto nombrarse Irving y obligaba a todos a decirle así, Lic. Irving, cabrón encima licenciado, “en que si se puede saber” “contabilidá”, me contesta muy orondo “ahhh con razón no te dejan entrar al cielo”

Este fin de semana Jana estará de intensivo en casa y no quiero problemas así que he arreglado con Irving que si el no me molesta el Viernes por la noche le conseguiré toda la novela de Rosa Salvaje para que se deleite viendo gente de su onda.

Para que llamar a los cazafantasmas.

P.D. Espero que Irving no sea gay

1 comentario:

Anónimo dijo...

No manches este cuento si que está bien fumado...como bizarro. De dónde lo sacaste wey?