viernes, 11 de julio de 2008

Qué diablos estabas pensando? XX/XY


Es la pregunta que frecuentemente se hace uno mismo o te hacen los cercanos a ti, después de haber hecho una pendejada, llámese algo arriesgado, ilógico, tonto o estúpido.

Esa pregunta me la hice hace algún tiempo, resulta ser que conocí en línea a una mujer de Shelbyville (bendito siglo XXI, bendita Internet) pues después de las consabidas conversaciones y pláticas en línea, se lanzó al aire la pregunta perseguida en este proceso.
Mujer de Internet: “cuando nos conocemos?”
Manteka: “Cuando vengas a Springfield a arreglar tus asuntos de la universidad”
M.I.: “tengo que ir este fin de Miércoles, a pagar la colegiatura y reinscribirme, podemos vernos en cinépolis, en el café”
M: Perfecto, miércoles a las 7, llevaré un traje de cortes inglés de pana roja y un girasol en el ojal, con un sobrero estilo willy wonka
M.I. : ahí nos vemos entonces, ardo en deseos de conocerte…

“Ya estas pastel!!”- pensó Manteka.

Llegó el Miércoles, todo listo, el girasol y el sombrero en su lugar, yo sentado en el café viendo a los parroquianos pasar, las hordas de estudiantes que van al cine los Miércoles, me puse a hojear mi revista de “sensacional de ingenieros” para matar el tiempo, a la hora convenida llego la chica, pedimos café y platicamos intercambiando las frases de cortesía pertinentes para ir allanando el camino a lo que pintaba ser una aventura de esas para recordar.

La velada cafetera transcurrió tranquilo sin contratiempo, decidí no hacer avanzada como buen chico católico irlandés guadalupano que soy, y no nos besamos en la primera cita, al día siguiente, la mujer del Internet me invitó a salir con unos amigos de ella, una pareja chico y chica, el lugar era un bar llamado “ella y ella”, conocido centro gay de Springfield, el ambiente era agradable, aunque raro ustedes me entienden , chico besa chica, chica besa chica, chico besa chico, cosas que ahí son cosa de todos los días.

Una vez aclimatados y pedido las bebidas nuestros acompañantes (XX,XY), comenzaron a tocarse de manera poco pudorosa y atrevida si me permiten decirlo, esto le prendió la pasión a mi acompañante, que con mas de una .08% de alcohol en su sangre se aventó a besarme, yo, me resistí los primeros .00002 segundos y después me entregue, después de repetidos besos, el arcángel Mamuel se apareció en mi cerebro y dijo “que diablos estas haciendo?”

Enseguida llegaron el manteka-angel y el manteka.diablo sobre mis hombros .

M.A. – “Pendejazo como sabes que estas besando a una mujer”
M.D. pues porque se ve como mujer weeeeeeeeeeey”
M.A. – Como sabes que no es un gay?, andas tomado, en un bar gay , con una persona que te dijo que es mujer solo en el chat, pendejo pendejo pendejo.
M.D. – “tu date wey, igual , si sale machín ya tienes una historia que contar”

Llegado a este punto de la discusión, con la duda plantada en la mente dije , “ya valió madre, estoy besando a un puto, pero que chido besa… cállate maldito cerebro”, decidí tomar el caso con lógica, así que me repegué a mi compañer@ pude sentir sus senos, lo cual me tranquilizó un poco.
M.A. Pendejo se inyecto estrógenos, por eso tiene tetas….
Diablos esto requiere una exploración mas a fondo.

Bueno pues…. Si era mujer, lo pude comprobar a cabalidad, en el bar y después de allí, podemos decir que es lo mas cerca que he estado de la línea de la homosexualidad, pero todo se dio bien chico besa chica y la velada fue tranquila, los amigos de mi amiga se desaparecieron y esta historia de manteka se acabó
Debo decir que todos los tipos quienes les cuento la historia desean fervientemente que mi amiga hubiera sido hombre, para pasar a convertirme en el objeto de sus historias y decir “a mi a migo manteka le paso en un bar que….”

Pero nooooooo, me salve de convertirme en el amigo que beso a un gay, ese amigo si existe pero les narraré su aventura en otra ocasión.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Jajajaja wey primero pregunta en tono de broma: ¿no naciste hombre verdad?, sobre todo si te llevan a un bar gay en la segunda cita.